El cantante mexicano enfrenta interrogatorios en aeropuertos estadounidenses debido a sospechas sobre financiamiento ilícito y menciones a figuras del crimen organizado en sus canciones
Hassan Emilio Kabande Laija, conocido artísticamente como Peso Pluma, se encuentra en el centro de una controversia que va más allá de su éxito en los corridos tumbados. Según el periodista Luis Chaparro, especializado en crimen organizado, agencias estadounidenses investigan al cantante por posibles lazos con el Cártel de Sinaloa. Chaparro afirmó que, según sus fuentes, Peso Pluma habría recibido apoyo financiero de dicha organización criminal al inicio de su carrera.
Además, las letras de sus narcocorridos, que mencionan a personajes del crimen organizado, han sido utilizadas por autoridades de México y Estados Unidos para identificar a individuos y operaciones de diversos cárteles. Un ejemplo es su canción sobre «El Gavilán», presunto jefe de seguridad de Los Chapitos, quien fue objeto de vigilancia tras ser mencionado en las letras del cantante.
Gusgri, anfitrión de un podcast, reveló que Peso Pluma es sometido a largas revisiones al ingresar a Estados Unidos. Un agente de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) le informó que cada vez que el cantante cruza la frontera, es enviado a una segunda revisión, donde enfrenta interrogatorios de dos a tres horas. Este fenómeno, donde las figuras mencionadas en los narcocorridos terminan bajo el escrutinio de las fuerzas de seguridad, es conocido en el ámbito musical como «la maldición de Peso Pluma».
